Suspicacias, tensiones y ausencias en el final de la campaña bonaerense
El raid de actos conjuntos del fin de semana, y los que vendrán, responde a una necesidad, más que a la convicción, cuentan desde el Frente de Todos. Obligado por encuestas que hablan de un “triunfo ajustado” en la crucial elección bonaerense, con la desconfianza como denominador común y esperando el espaldarazo que supondrá la presencia de Cristina Kirchner en el acto del jueves en La Plata, el presidente Alberto Fernández ordenó a sus ministros, intendentes de distintas corrientes y referentes sociales “salir a la calle” para defender la boleta encabezada por Victoria Tolosa Paz, la carta de la Casa Rosada para fortalecerse y morigerar lo que –descuentan– será una “ofensiva cristinista” por lugares en el gabinete una vez conocido el resultado de las PASO.
“Victoria es un tractor, pero después hay poco más”, reconoce otro miembro de la lista de candidatos que suele acompañarla en las recorridas. Hasta ahora, el gobernador Axel Kicillof apoyó con cuentagotas (casi siempre con el Presidente o la vice en el escenario) y también Máximo Kirchner (a pesar de sus chats con Tolosa Paz) espació sus apariciones junto a la postulante, a tono con la prolongada ausencia de su madre, desde el 18 de agosto.
Malestar con el Gobierno y malos presagios para Cristina Kirchner en el control del Senado
“Ella se empezó a correr hace rato, los demás interpretan y también se corren”, coinciden dos intendentes, que miran de reojo y como botón de muestra la campaña territorial en Ensenada, Quilmes y La Matanza, desde donde –aseguran– “no salió el apoyo contundente que tenía que salir”. Lo interpretan como prueba de que el Instituto Patria señalará a Tolosa Paz como una apuesta del Presidente, si la aventura fracasa. Recuerdan que la candidata fue sostenida por Fernández a pesar de la insistencia del cristinismo en ubicar en su lugar al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero. “Victoria es muy buena candidata, pero no es K nacida y criada. Eso la llena de sospechas para los muchachos”, coinciden cerca del Presidente.
La marcha motorizada el sábado por los movimientos sociales afines (Evita, la Corriente Clasista y Combativa y Somos Barrios de Pie) respondió a la necesidad de contrapesar lo que ellos mismos denominan “la pasividad de la mayoría de los intendentes”, que, según afirman, “cuidan sus votos a nivel local y lo que pase con la boleta nacional los tiene sin cuidado”. La “falta de política” o “la parálisis del miedo por lo que olfatean detrás del horizonte” son sus dos teorías para explicar el tibio apoyo, muchas veces con fotos para la ocasión y sin desarrollo territorial.
Desde la Casa Rosada dicen que los intendentes “jugaron bien”, y reconocen que la orden presidencial en las últimas horas fue “salir a convencer, porque hicimos mucho, más allá de la vacunación”.
La preocupación excede la avenida General Paz: por orden del Presidente, el ministro de Turismo, Matías Lammens, visitó Córdoba y Chubut (estará esta semana también en Neuquén) en carácter de promotor de “buenas noticias”, como el regreso de los viajes de egresados en octubre y la apertura gradual de fronteras.
Albertistas y cristinistas coinciden en valorar que, a pesar de que Fernández “perdió imagen” en los últimos tiempos, “no se perdió un solo voto” de los que Cristina sacó en las legislativas de 2017, cuando fuera derrotada por Esteban Bullrich en la elección de senadores. “Estamos competitivos después de 16 años, con pandemia incluida. No es menor”, recalcan desde un despacho cercano al presidencial y desde una intendencia.
La diferencia entre ambas tribus aparece en la valoración de la lista y también de cara al futuro. “Los votos de Cristina ya los tenemos, falta sumar otros. De ella, si se muestra, dicen que tapa a Alberto, y si sale poco, dicen que se borra”, afirma un referente comunal que elogia “el innegable carisma” de la vicepresidenta, en detrimento de los actuales candidatos. Cerca del Presidente, en cambio, elogian la “frescura” de Tolosa Paz y también la de Leandro Santoro, primer candidato del FDT en la ciudad de Buenos Aires.
“Todo se va a arreglar entre las PASO y la general, el miedo no es zonzo”, sentencian cerca de la vicepresidenta, donde reiteran que habrá “cambios de gabinete” y que “todo se va a ordenar”, utilizando el lenguaje de Cristina Kirchner en el acto que compartieron con el Presidente en Avellaneda. Desde la Casa Rosada el mensaje es el opuesto: un triunfo “claro” de Tolosa Paz fortalecerá al Presidente y dejará en claro que los funcionarios cuestionados (el propio Cafiero, Juan Pablo Biondi y Julio Vitobello) seguirán junto al primer mandatario en los meses que vienen.
Gane o pierda, Cristina se radicalizará
Junto a ellos, Fernández encabezará hoy un acto virtual en Chacarita con postulantes del FDT, una presencia que se repetirá durante la semana final.