La Academia: el emotivo homenaje a Gilda, a 25 años de su muerte

Este martes, ShowMatch comenzó de manera especial: con un homenaje a Gilda, a 25 años de su muerte. Con dos de las máximas referentes de la movida tropical en el estudio Karina “La Princesita” y Angela Leiva, la encargada de romper el hielo fue Fátima Florez quien vestida y maquillada como la cantante, interpretó algunos de los máximos éxito

“Me provoca una sensación muy especial hacer a Gilda y ver a sus fans, que año tras año se hacen más grandes y más fieles. Ella me ha ayudado en un momento muy especial de mi vida. Lo hago con el corazón. La amo”, expresó la imitadora. Y agregó: “Anoche no pude dormir. Gilda fue de las primeras mujeres en lanzase en un mundo dominado por hombres. Plantó bandera. Es un placer hacerla en este espacio. Cada vez que uno canta una de sus canciones, te acaricia el alma”.

Gilda: la santa pagana a la que le atribuyen milagros y que murió viajando en el micro que hoy es su santuario

Emocionada hasta las lágrimas, Florez agradeció a Toti Giménez, pareja de Gilda, por haberle cedido las pistas originales. “Voy a llevar a Gilda a todo el rincón del país. Siempre va a estar en mi corazón”, finalizó la actriz.

Karina, entonces, tomó la palabra: “Considero que hay que brindarle un homenaje eterno a las mujeres que nos abrieron las puertas a las que vinimos después. Lo más difícil es ser aceptada por las otras mujeres y ella lo logró. Gilda le hace falta aun hoy a la música argentina. Me conmocionó ver a Fátima. Es hermoso que la podamos seguir recordando con el mismo amor, después de tanto tiempo”.

Leiva coincidió con su colega: “Gilda para mí es muchísimo: me acompaña, desde mis inicios. Cuando me presenté al concurso para grabar mi primer disco le pedí a ella, y lo gané. Nos abrió las puertas a todas, en una época en la que el machismo estaba mucho más instalado que ahora. Ella pasó muchas y es una mujer con todas las letras, digna de admirar”.

Entonces, Marcelo Tinelli le pidió a la exparticipante de “La Academia” que cantara algunos de los temas de Gilda y ella accedió.

En el atardecer del 7 de septiembre de 1996, Gilda se dirigía por la ruta 12 hacia la ciudad de Concordia, en la provincia de Entre Ríos, donde esa noche ofrecería un concierto. Alrededor de las 19, la cantante dormitaba en el ómnibus en el que viajaba junto a su banda de músicos liderada por su pareja Giménez, su madre y su hija. Su hijo Fabrizio había quedado en Buenos Aires, al cuidado de su padre.

Cuando el micro transitaba a la altura del kilómetro 129, en jurisdicción de Ceibas, se encontró con un camión de frente que venía en dirección contraria tratando de pasar a otro acoplado. El chofer del micro dio un volantazo hacia la banquina, pero un desnivel de cemento lo hizo rebotar hacia el camión, impactando ambos vehículos de manera frontal. En la tragedia fallecieron Gilda, su madre Tita y su hija Mariel, tres músicos y el chofer.