Candidato a primer ministro de japón apunta a reducir disparidad de ingresos
Por Tetsushi Kajimoto, Daniel Leussink y Kiyoshi Takenaka
TOKIO, 8 sep (Reuters) – Japón debe luchar por una nueva
forma de capitalismo para reducir la disparidad de ingresos que
se agravó durante la pandemia de COVID-19, dijo el miércoles
Fumio Kishida, quien aspira a convertirse en el próximo primer
ministro.
Kishida, exministro de Asuntos Exteriores, presentó su
política económica en el marco de la carrera por el liderazgo
del Partido Liberal Democrático (PLD), que comenzó la semana
pasada después de que Yoshihide Suga dijera que iba a dimitir.
El ganador tiene asegurado convertirse en el próximo primer
ministro de Japón.
La exministra de Interior, Sanae Takaichi, se unió a Kishida
en la contienda, presentando una plataforma conservadora,
mientras que el popular jefe del programa de vacunación, Taro
Kono, se reunió con pesos pesados del partido mientras sopesa
sus posibilidades.
Si Takaichi, de 60 años, consigue superar las
probabilidades, se convertiría en la primera mujer líder de
Japón.
Kishida dijo que la desregulación durante la era de las
reformas a principios de la década de 2000 amplió la brecha
entre los que tienen y los que no tienen, y que el «Abenomics»
del exprimer ministro Shinzo Abe, que pretendía arreglar las
maltrechas finanzas logrando un alto crecimiento e impulsando
los ingresos fiscales, no se tradujo en beneficios.
«Sin distribución de la riqueza no habrá un aumento del
consumo y la demanda (…) no habrá más crecimiento si se pierde
la distribución de la riqueza», dijo Kishida en una presentación
en Tokio el miércoles.
«No hay duda de que el ‘Abenomics’ ha supuesto un gran logro
en materia de crecimiento, pero en términos de distribución de
la riqueza, el goteo aún no se ha producido», agregó.
Kishida repitió el pedido de un paquete de estímulo
económico y reiteró su apoyo al objetivo de inflación del 2% del
Banco de Japón como «norma mundial».
También pidió la creación de un fondo universitario de 10
billones de yenes (90.000 millones de dólares) para estimular la
ciencia y la promoción de las energías renovables.
(Reporte de Tetsushi Kajimoto, Daniel Leussink y Kiyoshi
Takenaka; reporte adicional de Antoni Slodkowski; editado en
español por Daniela Desantis)